Han sido siete meses recorriendo Europa y Estados Unidos. Descubriendo espacios de aprendizaje, encontrándonos con personas de todas las edades que están contribuyendo a cambiar la forma en que entendemos la educación. Recorriendo carreteras sobre dos ruedas, a ritmo de pedales. Compartiendo nuestras vivencias, tratando de construir puentes entre iniciativas públicas y privadas, entre experiencias educativas de diferentes países y lenguas diversas. Ahora el año 2014 toca a su fin, y nuestro viaje con él.

La gripe y el mal tiempo han estado a punto de echar por tierra la ilusión de entrar en Madrid (nuestra ciudad natal) en bici. Pero después de un viaje repleto de alegrías y emociones positivas nos resistíamos a ese final. Y ha sido la generosidad de una familia que, en el último momento, nos ha ofrecido su casa en un punto estratégico de nuestra ruta lo que nos ha permitido volver a soñar: el lunes 15 de diciembre, culminando más de tres meses de viaje, hemos hecho los 75 kilómetros que separan Collado Mediano de San Fernando de Henares. Una ruta que hemos vivido como un auténtico regalo.

La noche antes de partir sabíamos que al menos dos ciclistas nos acompañarían: Emiliano y Mauricio, con sus bicicletas Brompton. Dos argentinos valientes y generosos (que se han tomado el día libre en sus respectivos trabajos para estar con nosotros en este día tan especial). También, inesperadamente, se han sumado al plan Rodolfo (¡un argentino más!) y Pedro, bilbaíno. Gracias a todos ellos este recorrido ha sido una de las experiencias en bici más divertidas que hemos tenido en este viaje. Por si fuera poco, el día amanece precioso, soleado, con una claridad cristalina después de la lluvia torrencial del fin de semana. Así, en fabulosa compañía, vamos a disfrutar de las mejores vistas de la sierra, con sus arroyos, sus cumbres nevadas, la frescura del aire, buitres que secan las alas al sol de la mañana o vuelan en círculos sobre nuestras cabezas. Y el perfume de las jaras.

Llegamos a San Fernando al atardecer, después de seis horas pedaleando. El cuerpo está cansado pero nos sentimos ilusionados y felices, con una sensación de logro incomparable. Hemos llegado a Madrid, y el viaje en bici está acabando, pero seguimos en marcha: nuestra agenda no nos da respiro. Ya al día siguiente vamos a estar en la Universidad Autónoma para entrevistar a José Antonio Corraliza, catedrático de Psicología Ambiental, y a Silvia Collado, doctorada en Educación Ambiental. Queremos que nos hablen, entre otras cosas, de su investigación sobre los beneficios del contacto con la naturaleza para la prevención del estrés infantil.

Esta semana, además, visitaremos Madrid Active School (una escuela de reciente creación basada en los principios de una educación activa) para que nos hablen de su difícil decisión de homologarse como centro extranjero. Y el viernes charlaremos ante la cámara con Elisa Martín Ortega: madre, poeta, bloguera, investigadora, docente, y apasionada del universo infantil.

Para la semana próxima tenemos alguna sorpresa que aún no queremos desvelar. Podréis verlo en primicia en nuestra página de Facebook, en la que aprovechamos para celebrar que... ¡ya contamos con 3.000 seguidores! Gracias, como siempre, a todas y todos por acompañarnos y animarnos. Nada de esto habría sido posible sin vosotras.

Empezamos esta parte del viaje, por la Península Ibérica, un 9 de septiembre. Desde Málaga emprendíamos rumbo a Ítaca. ¿La hemos encontrado? Poco importa ya... el viaje ha sido largo, pleno de aventuras, de conocimiento, hemos entrado en puertos que nuestros ojos ignoraban, y hemos aprendido de los sabios... de los mayores sabios, sobre todo: nuestros niños y niñas.

Con cariño para Jaime, María, Gabriela, Jara y Bruno.